Las dietas y productos milagro que te garantizan una bajada de peso RÁPIDA suelen implicar bajada de grasa, liquido corporal, pero también de MASA MUSCULAR y otras estructuras proteicas.
Ya hemos hablado mil veces de lo importante que es no embarcarse en dietas milagro, restricciones muy rigurosas, estrictas y lineales que a menudo contribuyen a generar estrés físico y emocional. Las consecuencias para tu salud, para tu composición corporal y para tu estética son muy negativas.
Cuando adelgazas de forma caótica e incoherente puedes observar que bajas peso, pero bajas también MASA MUSCULAR. Con ello, pierdes TASA METABÓLICA BASAL, lo que va a facilitar un peligroso efecto yo-yo entre bajadas y rebotes y cada vez estarás peor en cuanto a la composición corporal.
Hay una expresión – ¡equivocada! – que seguro conoces: “cara o culo”. Hace alusión a esta forma desestructurada de adelgazar en que rompes no sólo masa muscular pero también otras estructuras proteicas como mucosas, piel, uñas, pelo. Puedes agravar la situación si le añades cierto estrés y una presencia excesiva de cortisol en tu organismo. Podrás notar el cabello más quebradizo, las mucosas más frágiles, el colágeno también se rompe y se te descuelga y arruga la cara, aumentará la flaccidez de abdomen, brazos, muslos.
Una persona que baja muy RAPIDAMENTE de peso, se lleva por delante masa muscular, también colágeno y otras estructuras proteicas que harán su piel más flácida y envejecida.
Si adelgazas de forma coherente, el organismo debe mejorar al mismo tiempo la FLEXIBILIDAD METABÓLICA, debes recurrir sólo a la oxidación de grasa y MANTENER TUS ESTRUCTURAS PROTEICAS. En suma, bajarás GRASA y debes mantener (incluso aumentar) MASA MUSCULAR.